Dos huracanes azotan a los Estados Unidos y no se sabe cuál causará mayores estragos. La semana entrante se hará el recuento de los daños: El de la naturaleza y el de la política. El primero incontrolable e irremediable; el segundo, manipulable e imparable. Ambos potentes y devastadores. El Huracán Sandy y las elecciones en el país van en diferentes direcciones, pero los dos van arrebatando todo lo que encuentran a su paso.
La naturaleza y la política no entienden de razones; avanzan sobre todo y todos. La diferencia entre una y otra radica en que la política está llena de naturaleza y esta, por el contrario, no necesita a la política; así que en un juego de rivales, la naturaleza siempre resulta vencedora.
Y mientras Sandy llega y se va en un par de días, la marejada de la política dura mucho más… cuatro años para ser exactos. El que resulte electo presidente de los Estados Unidos tendrá que surfear las olas creadas por el huracán de su misma campaña electoral y también el oleaje de la contienda agresiva de su contrincante. Durante el periodo electoral se dicen y hacen tantas cosas, que esos ataques políticos no se olvidan ni se borran al tomar una protesta presidencial; hay que aprender a navegar en ellos.
El próximo 6 de noviembre sabremos que tan graves fueron las consecuencias del huracán político o si en verdad los daños no fueron tan cuantiosos. Quizá sea la participación ciudadana la que sorprenda más que el mismo resultado electoral, principalmente aquí en el Condado Maricopa.
Y hablando de nuestras tierras, que parecen secas y áridas pero también están siendo azotadas por el mismo huracán político, habrá que esperar a ver qué pasará en la contienda del sheriff del Condado Maricopa y también en la del Senado Federal. Dos bastante complicadas y controvertidas. Dos cruciales. Dos decisivas para el futuro de la comunidad hispana.
¿Será este el año en que se le diga adiós a Arpaio o será el año en el que demuestre que a pesar de todo puede lograr una sexta reelección? ¿Será el 2012 el año en el que un hispano llegue al Senado o será la época en la que otro republicano ocupe el cargo? ¿Será este año que Arizona se convierta en un estado decisivo en la campaña presidencial? ¿Será este año en el que verdad despierte al “gigante dormido”? ¿Será este el año?
Los estragos del huracán electoral serán diferentes para cada quien dependiendo de los resultados. La contienda está muy cerrada y aunque el voto latino parece favorecer a Obama, a Carmona y a Penzone –todos demócratas- en estas elecciones, la última palabra no está dicha. Una cosa son las encuestas de opinión y otra muy diferente los votos contados. El recuento de los daños los hará cada quien y contará cómo le fue en la feria dependiendo de cómo les fue a sus candidatos. Sin embargo, sea cual sea el resultado, siempre existirán daños para alguien. Vote y protéjase del huracán.